Una preocupante situación en la atención de los servicios de urgencias quedó al descubierto tras operativos liderados por la Secretaría de Salud Municipal y la Personería de Ibagué, quienes acudieron a varias clínicas en respuesta al creciente número de denuncias de ciudadanos.
Durante las visitas, las autoridades encontraron pacientes canalizados en salas de espera, algunos con fuertes dolores soportando más de 40 minutos sin recibir atención médica, además de sobreocupación, desorden y demoras prolongadas en la atención especializada.
“Pacientes trasladados de otros municipios casi en el piso, insatisfacción generalizada, tiempos prolongados de espera, incluso personas que requerían cuidados intensivos y no habían sido ingresadas”, denunció Liliana Ospina, secretaria de Salud de Ibagué, al finalizar la inspección.
Los hallazgos fueron documentados por los auditores de salud y ya fueron remitidos a los entes de control competentes. La funcionaria aseguró que continuarán las visitas de vigilancia a estos servicios para garantizar condiciones dignas y oportunas para los usuarios.
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