En su primer gran pronunciamiento, el Papa León XIV aseguró que el mundo vive una guerra global fragmentada y pidió a las potencias cesar el fuego de inmediato.
El nuevo líder de la Iglesia Católica, el Papa León XIV, lanzó una poderosa advertencia que ha causado impacto global: “La Tercera Guerra Mundial ya está ocurriendo, pero de forma fragmentada”. Así lo afirmó desde la Plaza de San Pedro en el Vaticano, en uno de sus primeros discursos como Sumo Pontífice, haciendo un llamado urgente a los líderes de las grandes potencias para detener los conflictos armados actuales.
Robert Francis Prevost, el primer papa estadounidense y exarzobispo en Perú, no tardó en abordar temas delicados como la invasión rusa en Ucrania y el conflicto en la Franja de Gaza entre Israel y Hamas. “Me dirijo a los grandes del mundo, repitiendo el llamamiento siempre presente: ¡Nunca más la guerra!”, expresó con fuerza ante miles de fieles.
El Papa recordó el horror de la Segunda Guerra Mundial y advirtió que el mundo no puede permitirse repetir esa historia. Aseguró que es momento de actuar con valentía, empatía y humanidad. “No tengan miedo. Acepten la invitación de la Iglesia y de Cristo Señor”, afirmó, invocando a la Virgen María como guía espiritual en este momento de crisis.
Esta contundente declaración posiciona a León XIV como un Papa con una agenda global clara desde el inicio de su pontificado, enfocada en la paz, la justicia y el compromiso moral de los poderosos frente al sufrimiento humano. La comunidad internacional ahora observa con atención cómo reaccionarán las potencias frente a este ultimátum espiritual.
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