Kendyl Pool, una niña sorda de 10 años, ahora puede seguir conversaciones con facilidad gracias a unas gafas que transcriben el habla en palabras, brindándole una nueva forma de comunicarse y un impulso a su confianza.
Kendyl Pool, quien nació con sordera profunda, ha utilizado el lenguaje de señas americano (ASL) para comunicarse desde muy pequeña. Sin embargo, gracias a un regalo sorpresa de su madre, Bri, la niña ha experimentado una nueva forma de interactuar con el mundo: unas gafas desarrolladas por HearView que subtitulan en tiempo real las conversaciones habladas.
Estas gafas se conectan a través de Bluetooth a una aplicación que utiliza tecnología de reconocimiento de voz para transcribir las palabras habladas y las muestra en una pequeña pantalla integrada en las lentes. La sorpresa fue tan grande para Kendyl que, al ponerse las gafas y ver las palabras que su madre decía, no pudo evitar emocionarse y llorar. “Se quedó atónita, incluso lloró un poco porque no podía creer que pudiera ver lo que estaba diciendo frente a ella”, contó Bri.
Además de permitirle seguir conversaciones, las gafas también ayudan a Kendyl a practicar el habla, al ver si sus propias palabras aparecen correctamente en la pantalla. “Cuando aparece, se emociona mucho”, añadió Bri, destacando que la niña usa las gafas para verificar si está pronunciando bien las palabras, ya que no puede escucharse a sí misma.
Estas gafas no solo mejoran la comunicación en tiempo real, sino que también permiten a Kendyl revisar conversaciones importantes más tarde, como las de sus maestros o médicos. Para su madre, este avance es crucial para la inclusión de las personas sordas, ya que ofrece acceso completo y preciso a lo que se dice a su alrededor. “Es un gran paso para la inclusión”, expresó Bri, destacando la precisión y utilidad de esta tecnología en la vida cotidiana de Kendyl.
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