👶 El ministro Guillermo Jaramillo defendió la vacunación obligatoria para menores y aclaró su polémica declaración sobre la patria potestad.
En medio de la creciente alerta sanitaria por la fiebre amarilla en Colombia, el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, afirmó que el Estado puede intervenir en casos donde los padres se nieguen a vacunar a sus hijos, siempre que exista un riesgo evidente para la salud pública. La declaración se dio en entrevista con La W, tras la controversia generada por su afirmación sobre la patria potestad en situaciones de emergencia.
Jaramillo recalcó que su intención no fue afirmar que el Estado se adueña de la patria potestad, sino destacar que el artículo 44 de la Constitución da prioridad a los derechos de los niños, incluso por encima de la voluntad de los padres, cuando su salud y vida están en peligro. “No se trata de autoritarismo, se trata de proteger la vida de los menores”, insistió.
El ministro destacó que en municipios de departamentos como Tolima, Caquetá y Meta, algunos padres han rechazado la vacunación contra la fiebre amarilla, lo cual representa un riesgo grave ante los brotes registrados. “Hemos tenido 20 muertes y 47 casos confirmados en lo que va del año, principalmente en personas no vacunadas”, advirtió Jaramillo.
El ICBF también se pronunció, aclarando que la patria potestad sigue siendo de los padres según la ley, pero respaldó la posibilidad de intervención estatal en caso de vulneración de derechos. Mientras tanto, el llamado del Gobierno es claro: la vacunación es obligatoria en zonas de riesgo, y las autoridades locales deben garantizar su cumplimiento para evitar nuevas tragedias.
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