Un revolucionario estudio científico ha desvelado finalmente el gran misterio del interior de la Luna. Después de siglos de especulaciones, mitos y teorías, un equipo de astrónomos liderado por Arthur Briaud ha logrado confirmar que el núcleo de nuestro satélite natural es una esfera sólida de hierro, de 258 kilómetros de ancho. Este hallazgo, publicado en el diario Nature, cambia la comprensión que teníamos sobre la estructura interna de la Luna, y desmiente viejas creencias sobre su composición.
Durante décadas, se pensaba que la Luna era hueca o incluso que estaba hecha de “queso verde”, una idea respaldada por mitos populares. Sin embargo, con el avance de las misiones espaciales y tecnologías como los láseres dirigidos a la superficie lunar, los científicos han recopilado datos precisos que revelan una compleja estructura interna similar a la de la Tierra.
El estudio también aporta nuevas pruebas sobre la dinámica del manto lunar, sugiriendo un proceso de “volcadura activa”, donde los materiales más pesados se hunden hacia el centro y los más ligeros ascienden, algo que hasta ahora solo se había teorizado en zonas volcánicas de la Luna. Este descubrimiento no solo resuelve preguntas sobre la evolución geológica de la Luna, sino que también podría ofrecer pistas sobre el bombardeo lunar durante los primeros mil millones de años del Sistema Solar.
Con estos nuevos conocimientos, los científicos ahora pueden reescribir la historia de nuestro satélite y entender mejor los procesos que ocurrieron hace miles de millones de años. ¡La Luna, esa vieja amiga, guarda más secretos de los que imaginábamos!
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