El Congreso de la República ha aprobado la Ley contra el Ruido, un marco normativo innovador que busca mitigar los efectos negativos de la contaminación acústica en la salud y el bienestar de los colombianos. Esta iniciativa se alinea con la creciente evidencia de los impactos del ruido en la calidad de vida y establece una estrategia integral para su gestión en el país.
Objetivos clave de la Ley contra el Ruido
- Política de Calidad Acústica
- La ley propone la creación de una Política de Calidad Acústica para reducir los niveles de ruido y mejorar el ambiente sonoro.
- El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible liderará la implementación, diseñando mapas de ruido, indicadores de calidad acústica y programas de mitigación.
- Se establecerán niveles de prevención, alerta y emergencia relacionados con el ruido.
- Protección de la salud
- El Ministerio de Salud actualizará las normas acústicas en un plazo de 18 meses.
- Se realizarán estudios sobre los impactos del ruido en la salud, incluyendo efectos en personas con autismo y los costos asociados para el sistema de salud.
- Mejoras en el entorno construido
- El Ministerio de Vivienda desarrollará estándares de aislamiento acústico para edificaciones, promoviendo el confort sonoro en espacios habitables.
- Control del ruido en el transporte
- El Ministerio de Transporte actualizará las reglamentaciones para reducir el impacto sonoro de vehículos y promover tecnologías de transporte más silenciosas.
- Gestión territorial y comunitaria
- Las autoridades locales deberán incluir medidas acústicas en sus Planes de Ordenamiento Territorial en un plazo de 12 meses.
- Se fomentará el uso de tecnologías portátiles para medir el ruido, permitiendo una mayor participación ciudadana en el control del problema.
Impactos esperados_
La contaminación acústica, reconocida por la Organización Mundial de la Salud como una amenaza para la salud pública, está relacionada con problemas como estrés, insomnio, enfermedades cardiovasculares y pérdida auditiva. Según la OMS, los niveles de ruido superiores a 65 decibeles pueden causar daño, y los que superan los 85 decibeles son especialmente peligrosos.
Con la implementación de esta ley, Colombia busca no solo proteger la salud de sus ciudadanos, sino también fomentar la convivencia pacífica, dado que el 70% de los conflictos de convivencia están vinculados al ruido.
Próximos pasos:
El proyecto está a la espera de la sanción presidencial para convertirse en ley. Su implementación marcará un avance significativo en la calidad de vida de los colombianos y en la sostenibilidad del país.
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