El presidente Gustavo Petro afirmó que no hay una crisis de seguridad nacional, sino problemas focalizados en Cali, Bogotá y Pereira, ciudades donde la violencia ha repuntado en los últimos dos meses.
Durante el primer encuentro de comandantes de la Policía Nacional, el presidente Gustavo Petro descartó que Colombia atraviese una crisis de seguridad generalizada. Según explicó, los indicadores de homicidio muestran un aumento significativo únicamente en tres ciudades: Cali, Bogotá y Pereira, donde se registraron 50, 34 y 29 homicidios más, respectivamente, en comparación con el mismo periodo de 2024.
“Si estas tres ciudades no hubieran subido sus homicidios, la tasa nacional habría bajado sustancialmente”, aseguró el mandatario, quien señaló que en el resto del país los niveles de violencia no han empeorado. No obstante, reconoció que el país enfrenta un problema que requiere una respuesta urgente y focalizada.
Sobre Bogotá, Petro recordó su gestión como alcalde (2012–2015), cuando la capital logró cifras históricas en reducción de homicidios. “En Bogotá está pasando algo que antes no sucedía”, alertó, aunque señaló que la situación más preocupante se presenta en Pereira, posiblemente por enfrentamientos entre organizaciones criminales.
El presidente también resaltó que 21 capitales del país han logrado reducir sus cifras de homicidio, entre ellas Medellín, Cartagena, Neiva y Barranquilla. Finalmente, hizo un llamado urgente a reforzar el control sobre los puertos del país, en especial los de Buenaventura, donde el contrabando y la corrupción —como en el caso del llamado “zar del contrabando”, alias Papá Pitufo— han incrementado la presencia criminal en zonas estratégicas.
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