En una operación de alto impacto humanitario, 116 colombianos arribaron a la base aérea de Catam, provenientes de Beirut, Líbano, en un vuelo coordinado por la Fuerza Aérea Colombiana (FAC). A su llegada, fueron recibidos por el canciller Luis Gilberto Murillo y el ministro de Defensa, Iván Velásquez, quienes destacaron la importancia de esta misión en medio de la creciente crisis en Medio Oriente.
El avión Júpiter, que había partido desde Bogotá días antes, completó la delicada tarea de evacuar a los colombianos que solicitaron regresar ante los incesantes bombardeos en la región, derivados del conflicto entre Israel y grupos insurgentes en el Líbano. Una de las pasajeras, visiblemente afectada, relató los momentos de tensión previos al despegue: “Vivía feliz en el Líbano, pero tuve que salir huyendo con mis hijos, dejando atrás a mi esposo. Espero que sigan haciendo más vuelos porque la situación es insoportable”.
La misión fue posible gracias al esfuerzo conjunto entre la Cancillería y el cuerpo diplomático en Beirut, quienes han trabajado intensamente para garantizar la seguridad de los colombianos en el exterior. Funcionarios del Grupo de Reacción Inmediata de la Cancillería acompañaron el vuelo, brindando apoyo a los repatriados.
El gobierno libanés, por su parte, ha solicitado cooperación internacional para enfrentar la crisis humanitaria causada por el conflicto, que ha forzado a más de un millón de personas a desplazarse. Con los albergues locales desbordados, la situación sigue siendo crítica.
Esta operación de rescate es un recordatorio de la importancia de la solidaridad y la acción rápida en tiempos de emergencia.
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